Hoy, una colaboración global entre científicos, productores de camarón, productores de alimento y especialistas en sostenibilidad está trabajando para comprender mejor el alcance real de las emisiones directas de los estanques de camarón.
BioMar es un socio clave en este proyecto, colaborando con ThinkAqua bajo la iniciativa IDH para medir y analizar estas emisiones y profundizar en la comprensión del impacto ambiental de la producción de camarón. Ecuador, como uno de los mayores productores mundiales, es el escenario principal de esta investigación.
Los estanques de camarón son ecosistemas dinámicos con una intensa actividad microbiana. Estos microorganismos descomponen residuos, alimento no consumido y materia orgánica, liberando gases que terminan escapando hacia la atmósfera. El metano es especialmente problemático, ya que se genera en zonas deficientes de oxígeno en el fondo de los estanques. Por su parte, el óxido nitroso —aún más potente que el metano como gas de efecto invernadero— se libera a través de los procesos microbianos relacionados con el ciclo del nitrógeno.
Para entender mejor estas emisiones, los investigadores diseñaron dispositivos flotantes que permiten capturar los gases. Estas cámaras invertidas, sencillas pero
eficaces, atrapan y miden los gases que emergen de la superficie del agua. A través del muestreo en estanques ecuatorianos bajo distintas técnicas de manejo y ciclos productivos, la investigación busca determinar cómo influyen las prácticas de cultivo en las emisiones y detectar oportunidades de reducción.
Pero este proyecto va más allá de lo científico: es clave para avanzar hacia una industria camaronera más sostenible y competitiva. Ecuador es un actor fundamental en el mercado global de productos del mar, y BioMar está comprometida con impulsar su desempeño ambiental a largo plazo.
Mejorando las formulaciones de alimento, optimizando las técnicas de aireación y perfeccionando la gestión de las granjas, los productores de camarón pueden reducir significativamente sus emisiones y, al mismo tiempo, mejorar su rentabilidad.
Los resultados de este trabajo impactarán mucho más allá de Ecuador, influyendo en la producción global de alimentos del mar y consolidando el liderazgo del país como referente en camaronicultura responsable.